Un agente policial habría matado de un balazo al pecho a un compañero de uniforme en un confuso hecho en el que el victimario sostiene la hipótesis de que “jugaban” con las armas mientras cenaban en el destacamento.
La víctima fue identificada como el raso Daury Herrera Mercedes, mientras que el confeso matador es el cabo Alejandro Quiroz Carrasco. La víctima recibió el impacto en el segundo espacio intercostal izquierdo con entrada sin salida del proyectil.
El victimario admitió el hecho y explicó que fue un accidente mientras jugaban con las armas de fuego, mientras cenaban.
“Fue un accidente, estábamos cenando y empezamos a relajar con las armas de fuego y se me disparó la pistola”, declaró.
Manifestó que el hecho se produjo en presencia de varios compañeros de armas que pueden ser los mejores testigos de que fue accidental la tragedia.
Tras ser examinado el cadáver, el legista Santini Calderón Gastón lo envió al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), en San Pedro de Macorís, para fines de necropsia.
Las armas serán examinadas, según reveló el fiscal de Hato Mayor, Henry Estévez, quien se presentó a la escena del crimen.
El fiscal Estévez dijo que la hipótesis de que fue un juego será investigada debidamente.