Los hoyuelos en al espalda, esos dos huequitos que se tienen encima del trasero, no solo son una cualidad estética o una pasión oculta objeto de fetichismo, también pueden revelarnos cosas sobre quienes los lucen: se trata de personas con más facilidad para alcanzar el orgasmo. De hecho, a estos huecos se les ha llamado tradicionalmente también los 'Hoyuelos de Venus'.
No es un hecho comprobado científicamente, pero sí ampliamente divulgado y sostenido por quienes los poseen.
El origen puede tener que ver con la fisonomía: estos hoyuelos se encuentran en la zona baja lumbar, justo en el lugar en el que, entre la apófisis espinosa (dos prominencias óseas que surgen de la parte posterior de las láminas de las vértebras) y el punto de unión de los glúteos. Ahí se encuentra el llamado rombo de Michaelis de los que los houelos serían los vértices.
La teoría que relaciona los hoyuelos con mejores orgasmos aseguran que esos hoyuelos funcionan como receptores de estímulos nerviosos capaces de enviarlos eficazmente a lo largo de la columna vertebral.