Barahona.- La Directora Provincial de Salud Pública, dijo que el mercado público es una bomba de tiempo que debe ser intervenido por las autoridades para evitar consecuencias nefastas para la población.
La doctora Amelia Figuereo Féliz, dijo que se trata de una bomba de tiempo que puede estallar en cualquier momento, por lo que advirtió al alcalde Noel Octavio Suberví Nín (Tavito), para que le ponga atención a las condiciones de insalubridad en la principal plaza pública del municipio, ya que es su exclusiva responsabilidad.
“Vamos a contactar al señor síndico para ver de qué manera podemos coordinar acciones directas para el saneamiento del mercado”, dijo la funcionaria de la Dirección Provincial de Salud Pública.
Recordó que la situación de higiene e insalubridad en el mercado público no es solo responsabilidad de la DPS, sino que tiene que ser coordinado con el ayuntamiento, que afirmó es el responsable de la recolección de los desperdicios que se producen para llevarlos al vertedero.
Figuereo Féliz, dijo, además, que es un trabajo, también de la Dirección Provincial del Ministerio de Medio Ambiente para ver de qué manera apoya el trabajo de limpieza e higienización de la plaza municipal.
La profesional de la medicina, quien es epidemióloga, dijo que la población tiene razón cuando se queja por los altos niveles de insalubridad existentes en el mercado, sobre todo, cada vez que llueve.
Exhortación
La doctora Amelia Figuereo Féliz, dijo que en más de una ocasión ha exhortado a la población a no adquirir los productos que son ofertados en el suelo en el mercado municipal para evitar complicaciones médicas.
Afirmó que es responsabilidad de las autoridades municipales evitar que en el mercado los comerciantes vendan sus productos en el suelo y hacer que estos dispongan de mesa para la exposición de verduras, vegetales y otros productos.
Tiene el temor de que en cualquier momento se desate en la población un brote de infección diarreica, ya que al consumir productos que probablemente están contaminados que el paciente haga un proceso de diarrea o tenga una intoxicación alimenticia.
“Hay que tomar en cuenta que tenemos el cólera muy cerca, sobre todo, por nuestra condición de zona fronteriza y ya hemos tenido una cantidad de pacientes que han muerto en Haití de la enfermedad y otros que están padeciendo de esta condición de salud”, dijo.
Advirtió que en cualquier momento en este municipio se podría estar produciendo un brote de enfermedades diarreica, que puede ser por una parasitosis, pero también por consumir alimentos contaminados y de desatarse una epidemia de cólera en la población.
Por Benny Rodriguez