Los abogados de Radhamés Segura acusado de recibir soborno de la empresa Odebrecht pidieron hoy que se le levante la medida de coerción de prisión domiciliaria impuesta a su defendido, de forma tal que se le permita viajar a los Estados Unidos para continuar con el tratamiento médico a que a está siendo sometiendo en esa nación.
Engels Valdez y Ulises Bonnelly, defensa del ex vicepresidente de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) aseguraron que la prisión que guarda su cliente obedece a una supuesta relación con Ángel Rondón, que aseguran “es inexistente”.
Los juristas sostienen que Segura ha sido procesado porque un testigo portugués declaró que él tenía una relación muy estrecha con Rondón.
“Él guarda prisión por una supuesta relación de amistad con Ángel Rondón, que es inexistente, el señor Segura y Rondón se conocen circunstancialmente, pero no hay una relación íntima como la que supone uno de los testigos de Odebrecht, pero no están seguros de que a Radhamés se le ha pagado soborno”, sostuvo Bonnelly.
Demandaron que de ponerle a su defendido una medida de coerción, que sea una que le permita acudir a los requerimientos médicos.
Entrevistados esta mañana en el programa Hoy Mismo, que se difunde por Color Visión, canal 9, Bonnely señaló que al ingeniero Segura se le descubrió un linfoma en la parte derecha del hígado y que tiene que continuar con el tratamiento en un hospital en Baltimore, Estados Unidos, y que tiene cita para el próximo 10 de agosto.
En tanto que Valdez sostuvo que su cliente no presenta ningún peligro de fuga y que, por el contrario, favorece que las investigaciones se lleven hasta las últimas consecuencias.
Consideraron que a los encartados de Odebrecht se les ha dado un trato como si se trataran de imputados asesinos de peligrosidad.