Irma, el huracán atlántico más potente registrado, ha alcanzado este viernes las islas Turcas y Caicos, al noreste de Cuba, y se dirige hacia Florida, donde se prevé que toque tierra este sábado.
Deja tras de sí un rastro de destrucción en el Caribe, al menos 14 muertos, según Reuters, y ha devastado “el 95% de la isla de San Martín”, ha afirmado el responsable de un consejo local, Daniel Gibbs, a una emisora.
Con vientos máximos sostenidos de 290 kilómetros por hora, la tormenta ha causado estragos en San Martín, las Islas Vírgenes y Barbuda, islas del noreste del Caribe. El primer ministro de este último territorio, Gaston Browne, ha asegurado que todo ha quedado reducido “a escombros”.
Aunque se espera que atenúe su fuerza hasta un nivel 4, los servicios de emergencia de Florida ya han comenzado las evacuaciones y han ordenado a los turistas que abandonen los Cayos. También se han dictado órdenes de evacuación para la costa atlántica de Georgia y que estarán en vigor a partir del sábado, según el gobernador, Nathan Deal.
Especialmente preocupante es la situación en la vulnerable Haití, país que aún arrastra las secuelas del terremoto que lo devastó en 2010. Tras sobrepasar este viernes Antigua, Barbuda, San Cristóbal y Nieves, Irma seguirá recorriendo el Caribe y llegará a las costas de Florida.
Rastro de muerte y destrucción
En las Islas Vírgenes, el balance es de al menos cuatro muertos, según ha informado el portavoz del gobierno del territorio, Lonnie Soury. “No estamos seguros de que no haya más (muertos)”, ha dicho, en declaraciones a Reuters. Un hospital ha quedado destruido, mientras que en Anguila también se han registrado daños en el sistema sanitario y aeroportuario, así como cortes en los suministros de electricidad y telefonía.
En Barbuda ha perdido la vida al menos una persona, y el primer ministro francés, Edouard Philippe, ha confirmado cuatro fallecidos en la parte gala de San Martin, mientras que en la holandesa se ha registrado una muerte. Por otra parte, Barbados y la isla británica de Anguila también han confirmado un fallecido en cada territorio.
A estas cifras se suman tres muertes en Puerto Rico, donde según el gobernador, Ricardo Rossello, dos terceras partes de la isla se han quedado sin luz. Puerto Rico es una de las varias zonas de Estados Unidos donde se ha declarado el estado de emergencia y preocupa especialmente las consecuencias que pueda tener la tormenta al tocar tierra en Florida el domingo.
Evacuados “a la fuerza”
La tormenta también ha afectado a la parte norte de la isla La Española, que comparten República Dominicana y Haití. El presidente haitiano, Jovenel Moise, ha pedido a todos los habitantes de las zonas en riesgo que acudan a los refugios de forma inmediata, ya que de lo contrario serán evacuados “por la fuerza”.
Las autoridades cubanas han procedido a evacuar a miles de personas en la zona septentrional, en particular en los Cayos, especialmente frecuentados por los turistas. El Gobierno de Canadá ha optado directamente por sacar a todos sus ciudadanos, según el ministro de Turismo cubano, Manuel Marrero.
“No creo que hayamos visto nada así”, ha reconocido el presidente estadounidense Donald Trump, en relación a la potencia del viento asociado a Irma. El mandatario ha instado a los habitantes de Florida a protegerse y a estar “muy, muy vigilantes” ante lo que pueda ocurrir en los próximos días
Trump ha declarado este mismo jueves el estado de desastre en las Islas Vírgenes y ha ordenado la entrega de ayuda federal a los esfuerzos de recuperación, según un comunicado publicado por la Casa Blanca.
El huracán Irma ya descarga sobre la República Dominicana
Irma pierde fuelle, pero sigue preocupando
El ojo del huracán Irma ha llegado este viernes a la isla Gran Inagua (sur de Bahamas) con vientos máximos de hasta 260 kilómetros por hora que lo mantienen en categoría de intensidad 5 pese a que ha perdido algo de fuerza en las últimas horas, informó el Centro Nacional de Huracanes de EE.UU. (NHC, en inglés).
Aunque el huracán se mantiene en categoría de intensidad 5, la máxima en la escala Saffir-Simpson, los vientos actuales indican que ha perdido algo de fuerza respecto a los 295 kilómetros por hora que mantuvo en los últimos días.