Hace algún tiempo, Mayra Rosales, originaria de Texas, en Estados Unidos, fue nombrada como “la mujer más obesa del mundo”, ya que por distintas situaciones y complicaciones en su vida, llegó a pesar casi 500 kilos.
Tantas libras de más provocó que Mayra no pudiera valerse por sí misma. No podía moverse, ni ir al baño; tenían que bañarla a cubetadas y vivía postrada en su cama. Durante 10 largos años estuvo sin poder caminar y llegó a tal estado que lo único que esperaba es que en cualquier momento, la muerte llegara por ella.
A esto, habría que agregarle que vivió un momento sumamente duro cuando fue acusada de haber asesinado a uno de sus sobrinos. De hecho, ella se declaró culpable de la muerte del chico, argumentando que lo había aplastado sin que ella se diera cuenta, para así salvar a su hermana de ir a la cárcel, ya que ella fue quien acabó con la vida de su propio hijo, pues Mayra estaba dispuesta a ir a la cárcel, ya que creía que su vida no tenía futuro ni esperanza alguna.
Por fortuna, un día cambió ese pensamiento negativo y decidió pedir ayuda profesional. Se sometió a las manos de distintos especialistas médicos, quienes le practicaron un bypass gástrico y 11 operaciones más para remover el exceso de piel de su cuerpo.
Con esto, más dieta y ejercicio constante, hoy a sus 37 años, Mayra es completamente otra persona. Hoy pesa 96 kilos, encontró al amor de su vida y trabaja en un hospital apoyando a personas que sufren de obesidad como ella, para que puedan superarla y cambiar por completo sus vidas.