MANAGUA.- La recién formada tormenta tropical Nate dejó el jueves al menos 22 muertos en Nicaragua y Costa Rica, y se mueve en una trayectoria que podría llevarla el fin de semana a la costa estadounidense en el Golfo de México, informaron las autoridades.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos indicó que la tormenta podría generar inundaciones en Honduras, donde se prevé que arroje entre 380 y 500 milímetros (entre 15 a 20 pulgadas) de lluvia, e incluso más en algunas zonas.
Los vientos máximos sostenidos de Nate alcanzaban los 65 kilómetros por hora (40 millas por hora) el jueves por la noche, y se vaticina que cobrarán fuerza sobre el mar Caribe el jueves en la noche y el viernes, antes de su posible llegada a la Península de Yucatán, en México, donde se ubica la ciudad turística de Cancún.
En Nicaragua, la tormenta llega después de dos semanas de lluvias constantes que han dejado el suelo saturado y los ríos crecidos. Las autoridades han declarado alerta para todo el país y han advertido sobre posibles inundaciones y deslizamientos.
La vicepresidenta Rosario Murillo informó de 15 decesos, pero no dio muchos detalles. Dijo que dos mujeres y un hombre que trabajaban para el Ministerio de Salud fueron arrastrados por las aguas de un canal inundado en la municipalidad de Juigalpa, en el centro del país.
El gobierno cerró todas las escuelas.
Por otro lado, el Organismo de Investigación Judicial de Costa Rica señaló que siete personas murieron en el país debido a la tormenta y que 15 más están desaparecidas. Cinco mil residentes tuvieron que recurrir a albergues de emergencia debido a las inundaciones.
En Luisiana, adonde se vaticina que Nate llegará el domingo como huracán, el gobernador John Bel Edwards declaró estado de emergencia y movilizó a 1.300 efectivos de la Guardia Nacional, 15 de ellos a Nueva Orleans para que monitoreen el endeble sistema de bombeo que hay allí.
Edwards exhortó a los habitantes a que estén preparados para intensos chubascos, marejadas y vientos intensos, y que al anochecer del sábado se encuentren ya donde tengan planeado guarecerse.
El gobernador dijo que los pronósticos indican que Nate avanzará rápidamente, por lo que no arrojaría una cantidad extraordinaria de lluvias. Las autoridades estatales esperan que ello signifique que las bombas de Nueva Orleans puedan darse abasto en el desalojo del agua.
Sin embargo, Edwards advirtió que no hay que subestimar a la tormenta.
Las autoridades ordenaron la evacuación de parte del municipio St. Bernard al este de Nueva Orleans antes de que llegue el meteoro. Horas antes se solicitó un desalojo voluntario en Grand Isle, un poblado ubicado en una isla al sur de Nueva Orleans.
Nate se ubica a unos 75 kilómetros (45 millas) al oeste de Puerto Lempira, Honduras, y se dirige hacia el nor-noroeste a unos 17 kph (10 mph).
Los meteorólogos indicaron que el viernes por la noche podría haber condiciones de huracán en México.