BRASILIA.– La corte suprema de Brasil define hoy si el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva puede ser detenido para cumplir una larga condena por corrupción y lavado de dinero o si continúa en libertad hasta agotar todos los recursos en las máximas instancias judiciales.
El fallo del Supremo Tribunal Federal (STF) sobre un habeas corpus preventivo presentado por la defensa de una de las figuras emblemáticas de la izquierda latinoamericana tendrá un impacto central sobre el escenario político brasileño, cuando faltan siete meses para unas elecciones que se proyectan como las más inciertas desde el retorno de la democracia en 1985.
La sesión comenzará a las 14H00 locales (17H00 GMT) y se llevará a cabo apenas cuatro días antes de que el tribunal de segunda instancia de Porto Alegre (TRF4) responda una apelación contra la sentencia que condenó a Lula a 12 años y un mes de prisión, por recibir un apartamento de lujo de la constructora OAS, implicada en el escándalo de sobornos de Petrobras.
Una vista áerea de un departamento de 297 metros cuadrados en la azotea de un edificio residencial en Guaruja, Brasil. Un juez determinó que la constructora OAS preparó y renovó el apartamento, ubicado en primera línea de playa, para ser entregado al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva como soborno. (AP Foto/Andre Penner).
Si una mayoría de los 11 jueces del STF denegara el habeas corpus preventivo y el TRF confirmara el lunes la sentencia, Lula, de 72 años, quedaría a las puertas de la cárcel, ya que la jurisprudencia actual permite encarcelar a quienes tengan una condena firme en la segunda instancia.
Pero si el STF concediera el habeas corpus, Lula podría seguir en libertad, cualquiera sea el fallo del TRF4, mientras se desarrolla el proceso en su contra ante el Supremo Tribunal de Justicia (STJ) -tercera instancia- y eventualmente ante el propio STF. Una travesía que podría durar meses o años.
El STJ ya rechazó a inicios de marzo un habeas corpus preventivo de Lula.
No obstante, cualquiera sea el resultado, Lula no debería librarse de la inhabilitación que impone la justicia electoral a los candidatos condenados en segundo grado.
Líder holgado en los sondeos de intención de voto, el futuro electoral del expresidente (2003-2010) recién se dilucidará durante la ventana de inscripción de candidatos, entre el 20 de julio al 15 de agosto.
En medio de una clima de creciente tensión, la organización Vem Pra Rua, de gran protagonismo durante las protestas que derribaron el gobierno de la sucesora de Lula, Dilma Rousseff (2011-2016), publicó este jueves una solicitada de página completa en el diario Estado de Sao Paulo, con la consigna “La justicia es para todos”.
El Partido de los Trabajadores (PT, izquierda), convocó por su lado a una movilización frente al STF, con la consigna “Lula Libre”. También se esperan manifestantes contrarios al expresidente.