Este balance a las 20:00 hora local (00:00 GMT del sábado) es de 25.417 contagios más que el jueves y de 1.260 nuevas muertes.
El estado de Nueva York se mantiene como el gran epicentro de la pandemia en Estados Unidos con 358.154 casos confirmados y 28.853 fallecidos, una cifra parecida a la de España y solo por debajo del Reino Unido e Italia. Tan solo en la ciudad de Nueva York han muerto 21.086 personas.
El balance provisional de fallecidos -95.921- se aproxima a las estimaciones iniciales de la Casa Blanca, que proyectó en el mejor de los casos entre 100.000 y 240.000 muertes; pero ha superado ya con creces los cálculos más optimistas que hizo “a posteriori” el presidente Donald Trump de entre 50.000 y 60.000 fallecidos.
El Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud (IHME) de la Universidad de Washington, en cuyos modelos de predicción de la evolución de la pandemia se fija a menudo la Casa Blanca, calcula que para comienzos de agosto la crisis habrá dejado más de 143.000 muertes en Estados Unidos.
El presidente de EEUU, Donald Trump, ha estado insistiendo en las últimas semanas para que los diferentes estados levanten las restricciones al movimiento y las cuarentenas impuestas por el coronavirus, en un intento de mitigar los duros efectos económicos de estas medidas. De hecho, los 50 estados han reabierto sus economías en algún punto a partir de esta semana, siendo Connecticut el último en hacerlo.
No obstante, el impacto económico de la pandemia ha sido devastador para el mundo, y Estados Unidos no ha sido la excepción. Otros 2,4 millones de estadounidenses solicitaron un subsidio por desempleo en la última semana, una cifra que marca otro descenso con respecto a las últimas semanas, pero continúa estando en un nivel altísimo con respecto al promedio histórico, ante el confinamiento por la pandemia de coronavirus. El total desde el 21 de marzo se acerca a los 40 millones.
Nueva York estudia su reapertura
La ciudad de Nueva York avanza hacia una primera fase de reapertura que se producirá “la primera o la segunda semana de junio” dependiendo de si se mantiene de manera sostenida por debajo de ciertos “umbrales” en sus indicadores de coronavirus, por lo que las autoridades llamaron este viernes a la cautela ante la llegada del buen clima.
El alcalde Bill de Blasio, en su actualización diaria, explicó que la gran urbe en el epicentro de la crisis de COVID-19 deberá mantenerse “entre 10 y 14 días” -el tiempo estimado de incubación- por debajo de las 200 nuevas hospitalizaciones diarias, los 375 pacientes ingresados en la UCI y en una proporción inferior al 15 % de casos positivos sobre el total de residentes testados.
"Estar por debajo de esos umbrales de manera sostenida nos dejará claro que estamos listos para más progreso", afirmó el alcalde, que reveló que la ciudad cumple dos requisitos, con 76 nuevos ingresos y una proporción de positivos del 11 %, pero aún tiene demasiadas personas en cuidados intensivos, 451, aunque señaló que hace diez días eran 100 más.
La fase 1 de la reapertura, que ya ha abordado casi todo el estado y permite operar a negocios de construcción y manufactura, llegará a la Gran Manzana y a sus alrededores en “la primera o la segunda semana de junio, a menos que la gente sea indisciplinada, pierda la cuenta de los estándares y haya un resurgimiento que nos ralentice”, agregó.